Los campos magnéticos están presentes a toda escala en el Universo, desde los planetas y las estrellas hasta las galaxias y los cúmulos de galaxias incluso a distancias extremadamente grandes. Son importantes para la permanencia de la vida en la Tierra, el inicio de la formación de las estrellas, la estructura del medio interestelar, y la evolución de las galaxias. Entender el Universo sin entender los campos magnéticos no es posible. El origen y la evolución de los campos magnéticos es uno de las cuestiones más candentes en la astronomía moderna. La teoría para explicar los campos magnéticos en las estrellas y los planetas que tiene mayor aceptación es la teoría del dínamo α-Ω, que describe el proceso por el cual un fluido que gira, que tiene convección, y que conduce electricidad puede mantener un campo magnético durante escalas de tiempo astronómicas. A escalas mayores un proceso de dínamo similar podría producir campos magnéticos coherentes en galaxias mediante una combinación de turbulencia helicoidal, y rotación diferencial, pero hasta la fecha se ha encontrado escasa evidencia observacional en favor de esta teoría. Al analizar los datos disponibles de galaxias aisladas que no están en cúmulos, que no tienen interacciones con otras y con campos magnéticos a gran escala muy conocidos hemos encontrado una correlación muy estrecha entre la intensidad del campo magnético a gran escala y la velocidad de rotación de las galaxias. Esta correlación es lineal, si suponemos que los campos magnéticos y los rayos cómicos tienen energías esencialmente iguales. Esta correlación, sin embargo, no puede atribuirse a una dínamo α-Ω lineal, porque la correlación no existe con la cizalla global ni con la velocidad angular de las galaxias. La correlación observada muestra que el campo magnético anisotrópico y turbulento domina el campo a gran escala en las galaxias con rotación rápida, porque el campo magnético turbulento, que se acopla al gas, se aumenta y se ordena debida a la fuerte compresión del gas y/o la cizalla local en estos sistemas. Este estudio apoya una condición estacionaria del campo magnético a gran escala, mientras la masa dinámica de la galaxia permanece constante.
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