A la caza de satélites artificiales (III): Júpiter, las lunas galileanas y la ISS

Composición del paso de la ISS por el campo de Júpiter y sus satélites. De arriba abajo (izquierda a derecha) podemos ver a Europa, Calisto, Ío y Ganímedes. Crédito: A. Rosenberg (IAC) / D. López.
Fecha de publicación
Autor/es
Alfredo Rafael
Rosenberg González
Oswaldo González
Daniel López
Categoría

Tras meses vigilando la órbita de la Estación Espacial Internacional (ISS), la noche del 9 de diciembre de 2021, a las 19:32:35, en un lugar cercano al Zapato de la Reina, en el Parque Nacional del Teide, pudimos cazarla cruzando junto a Júpiter y sus satélites principales. No es nada sencillo, ya que deben coincidir varias circunstancias para que el evento se dé.

En primer lugar, la ISS debe estar iluminada. Ya vimos en nuestro artículo anterior que esto solo es posible algunos minutos tras el crepúsculo o antes del alba. Una vez que nuestro cielo observable se encuentra sumergido dentro de la sombra de la Tierra, no podremos ver la ISS salvo a contraluz, justo delante de un objeto brillante como la Luna. Podría ser un planeta, pero si resulta difícil cazarla delante del Sol o la Luna, imagínense frente a un planeta, …. En el mejor de los casos, Júpiter (el de mayor tamaño aparente tras Venus) alcanza un diámetro de casi 50 segundos de arco, que equivale al tamaño con el que veríamos un cráter importante en la superficie de la Luna, como puede ser el cráter Copérnico (Venus alcanza algo más de tamaño, pero en esos momentos está prácticamente a contraluz, mostrando una fase menguante o creciente muy sutil). Por otro lado, el Sol se ve a diario y la Luna en fases adecuadas varios días cada mes. Sin embargo, si queremos pillar los planetas al menos a una cierta altura sobre el horizonte, nuestro periodo de observación se encuentra bastante más limitado.

ISS y Júpiter
Imagen obtenida con un telescopio VISAC 8” y una cámara ASI290MM con filtros RGB. Inicialmente se capturaron los fotogramas de la ISS en el filtro L, con tiempos de exposición de milisegundos, y posteriormente se toman unas 1000 imágenes en los filtros RGB con tiempos de exposición optimizados para cada uno con el fin de componer la imagen en color del gigante gaseoso. También se toman exposiciones algo más largas para revelar las posiciones de los satélites. De arriba abajo (izquierda a derecha) podemos ver a Europa, Calisto, Ío y Ganímedes. También se distingue la gran mancha roja en la superficie del planeta, muy al borde en su parte inferior (A. Rosenberg y D. López)

Luego está la meteorología…. Afortunadamente, en Tenerife siempre hay más oportunidades subiendo bien alto, por encima de las nubes. Pero el territorio sobre el que poder desplazarse se reduce de forma notable. Tras algunos intentos infructuosos, en 9 de diciembre de 2021 volvían a darse las esperadas condiciones.

ISS y lunas galileanas
Imagen en la que se han superpuesto las dos observaciones, y en la que se hace coincidir el planeta Júpiter y sus satélites. Se puede apreciar cómo la órbita aparente de la ISS varía ligeramente debido a las diferencias en las posiciones de los observadores, separados apenas unos 10-15 metros (A. Rosenberg, O. González y D. López)

Al contrario de los casos en que buscamos tránsitos sobre la Luna o el Sol, para los planetas no conocemos un programa que nos facilite mucho el trabajo. Nosotros usamos heavens-above.com para obtener una primera aproximación. No vale la pena buscar con mucho tiempo de antelación, ya que la órbita de la ISS cambia con relativa frecuencia. Un par de semanas ya es algo bastante arriesgado. Recuerden verificar la órbita hasta el último momento posible. Dentro de este programa, pulsamos sobre “Estación Espacial Internacional (ISS)” y nos muestra los pasos visibles del satélite. Pinchando en la fecha, obtenemos un mapa estelar con la trayectoria de la ISS. Ahora se trata de buscar un paso cercano a un planeta. Si encontramos alguno interesante, podemos comenzar a jugar variando las posiciones en el mapa hasta dar con la que más pueda aproximarse (idealmente que pase justo por encima del planeta). Si pinchamos en el mapa, tendremos otro de mayor detalle. Cada 100 metros de error que cometamos al determinar la posición ideal, la ISS se separará del planeta en aproximadamente su propio tamaño. Incluso el valor de la altura introducido es muy relevante, más cuanto mayor sea el ángulo del planeta respecto al cénit. En nuestro caso, un lugar próximo al Zapato de la Reina en el Parque Nacional del Teide fue el punto más cercano al ideal en el que pudimos aparcar e instalar los telescopios. Una vez localizado el lugar óptimo, podemos tratar de verificarlo con Stellarium, simulando lo que ocurrirá desde la localización precisa: por dónde vendrá la ISS, orientación de los satélites galileanos, campo cubierto y resolución según el telescopio y cámara utilizado, etc.

¿Qué puede salir mal? Nuestra experiencia es que mil cosas: desde faltarte una pieza del instrumental (una anilla, un cable, …); quedarte sin memoria en el disco, sin batería en el ordenador o la montura; que el viento, las nubes o la humedad hagan imposible la observación; que justo aparezca un guarda del Parque Nacional a preguntar qué andas haciendo; dar un toquecito al trípode y desalinear la montura; que el mando de la montura no responda por la baja temperatura; …  por citar unas pocas.

Una de las cosas buenas de este tipo de tránsito/conjunción es que (normalmente) ves venir la ISS desde un horizonte, pasar junto al planeta y alejarse de nuevo. En esta ocasión, aprovechamos para realizar dos vídeos, uno en tiempo real con un teleobjetivo de 200mm, y un timelapse de gran campo, que mostramos en esta entrada del blog. Resulta muy emocionante conseguir este tipo de reto. Es bastante más complicado que los tránsitos sobre el Sol o la Luna, pero ofrece una satisfacción proporcional a su dificultad.

ISS y Júpiter. Oswaldo G.
Imagen obtenida con un telescopio VISAC 8” y una cámara ASI178MM. Este telescopio estaba situado a unos 10-15 metros del telescopio con el que se obtuvo la imagen anterior, por lo que, por el efecto de paralaje, la imagen de la estación (que está a poco más de 400 km) está desplazada respecto a Júpiter (situado a millones de km.) haciendo transitar parte de sus paneles por delante de la superficie del planeta. Esto indica que el margen de error para obtener un tránsito de la ISS por delante del disco de Júpiter, es muy pequeño (O. González)​​​​​


Una vez más, les animamos a mandarnos sus capturas de la ISS junto a planetas para adjuntarlas a este artículo (con la autoría correspondiente, por supuesto).

Timelpase ISS y Jupiter

Timelapse obtenido con cámara réflex y objetivo de 15 mm (semi-ojo de pez) en la que se aprecia el paso de la ISS cruzando el cielo, y en especial pasando sobre Júpiter. Comienza viéndose gran parte del cielo estrellado, en el que destacan como objetos más brillantes la Luna y Júpiter (también Saturno es visible cerca del horizonte, más abajo y a la derecha). Se aprecia parte del perfil de las Cañadas del Teide y a los observadores tomando las imágenes. La Vía Láctea se puede distinguir a la derecha, aunque es difícil de percibir por el brillo de la Luna. Muchos satélites cruzan el cielo, siendo la ISS el más brillante, que pasa justo junto a Júpiter (D. López / IAC).

Vídeo ISS y Júpiter

Secuencia de vídeo de 28 segundos de duración obtenida con cámara réflex y objetivo de 200 mm en la que se aprecia la luz cenicienta de la Luna (la parte iluminada está saturada), así como algunas estrellas y Júpiter junto a algunos de sus satélites. La ISS pasa a lo largo del vídeo, cruzando claramente sobre Júpiter, todo ello en tiempo real (D. López / IAC)